Me vine a Indonesia con una Beca ICEX del Ministerio de economía.
Elegí Indonesia por mi vocación emprendedora y porque buscaba un país en emergencia que fuese a experimentar un gran crecimiento económico en los próximos 5-10 años. Tras los BRICS, al factorizar unos 20 criterios socioeconómicos, Indonesia me salía cómo la próxima gran opción. Además, tenía un idioma propio, lo que me daría un valor añadido.
Tras un año y medio en la OFECOMES, monté mis empresas. Empecé como agente y montando una consultora de acceso al mercado con mi socio Marc Alonso, también ex-becario ICEX. Posteriormente, con ayuda de la Embajada, conseguimos las autorizaciones para exportar carne de España (único país autorizado a día de hoy en Europa) y montamos una distribuidora que a día de hoy es una de las 5 más grandes del país e importa de todo el mundo. También conseguimos autorizar la exportación de lácteos y montamos una Joint-Venture con Laboratorios Ordesa para vender sus leches infantiles en Indonesia.
A día de hoy, entre todos los productos que llevamos podemos estar contribuyendo unos 25 millones de EUR anuales a las exportaciones españolas. Así que considero que el Programa ICEX es un éxito.
Mi primer contacto fue a través de mi experiencia en la Oficina Económica y Comercial. Allí, ayudaba a empresas españolas a buscar socios comerciales en el mercado, realizando estudios de mercado y analizando las regulaciones para invertir.
Todos los indicadores económicos y la experiencia sobre el terreno transmitían un país dinámico, lleno de oportunidades. Crecimiento del PIB por encima del 5%, cuarta mayor población del mundo, bajo endeudamiento sobre PIB -por debajo del 30%-, crecimiento del índice de industrialización, inversión directa extranjera y fuerte importación de productos. Además del optimismo de la población.
El gobierno de Jokowi, le dio además estabilidad política y seguridad jurídica.
El dinamismo y el crecimiento, además de un menor nivel en la madurez de la competencia. No todos los países están mirando hacia aquí todavía. Principalmente se encuentra fuerte presencia de japoneses, coreanos, indios,… pero de competencia europea o de productos de mayor valor añadido hay menos saturación.
Por otro lado, es un país con fuertes recursos naturales, como el níquel, que es estratégico a día de hoy. Esto le da unos fuertes ingresos y una sostenibilidad en el crecimiento, que acompañado del gran volumen de la población da un consumo inmenso para todo tipo de productos. De todo hay gran demanda e importación.
Ambos son estratégicos. La minería tiene entre un 8 y un 11% del PIB. Mientras que la agricultura presenta entre un 11 y un 13%.
En la agricultura destaca la producción de aceite de palma, del cuál Indonesia produce el 59% mundial. Fuera de eso el país es muy rico en caucho, cacao, café y té. Presenta muy poco desarrollo en ganadería e importa el 66% del consumo de carne que tiene el país.
Lo primero que hagan un análisis realista de la potencial demanda. Puede tentar hacer el cálculo fácil de venderle producto a los 280 millones de personas que hay en el país. Pero realmente hay que segmentar muy bien, conforme al poder adquisitivo de los distintos niveles socioeconómicos. No todo el mundo puede acceder a un producto importado. También, ver en dónde se va a distribuir ese producto porque hay deficiencias logísticas y van a dificultar su venta en todas las áreas del país.
Dicho esto, da un buen punto de partida, y los réditos vendrán después con el crecimiento del país una vez introducido.
Lo segundo, sería un buen análisis regulatorio y un cálculo moderado de los tiempos que llevaría la apertura. Hay certificados y procesos que requieren inversión y sólo valen para Indonesia. El packaging, por el idioma, no vale para otro país. Calcular bien las adaptaciones de producto.
Hacer una buena cadena de valor o escandallo para hallar el precio final al que llegaría el producto al mercado y posicionar el canal de distribución y localizaciones correctas.
Después, recomendaría ir de la mano de un buen socio indonesio, pero cubriéndose jurídicamente las espaldas para anticipar el potencial crecimiento que tendrán las ventas en el futuro.
Asesorarse bien y usar consultoría, ir de la mano de alguien con experiencia local para conocer el mercado. Apoyarse en la Oficina Económica y Comercial.
Lo veo brillante y los indicadores lo confirman año tras año. Poco a poco crece la transparencia jurídica, la estabilidad política, el poder adquisitivo de la población, la industrialización, la mejora de infraestructuras, mejor educación, su nivel de digitalización es ya muy avanzado.
Y lo más importante, el dividendo demográfico. La mayor parte de la población tiene menos de 18 años, eso quiere decir que durante los próximos 10 años se irán incorporando al mercado laboral y aumentará el consumo del país, lo que la convertirá en una de las 5 mayores economías mundiales en 2050 según Goldman Sachs. Yo apostaría por hacer esfuerzos y desarrollar este mercado cuanto antes para poder capitalizar ese factor.
Ebullición, dinamismo y oportunidades continuas pero con mucha mano izquierda, paciencia y persistencia.